Maduro sobre aprobación de la Ley Simón Bolívar: “Si Washington aprieta, nosotros apretaremos más”
El gobernante Nicolás Maduro señaló que la Ley Orgánica Libertador Simón Bolívar contra el Bloqueo Imperialista y en Defensa de la República Bolivariana de Venezuela, sancionada este jueves 28 de noviembre por la Asamblea Nacional (AN) de 2020, es un instrumento necesario para la protección.
Es una ley necesaria que dotará a la democracia venezolana de un arma jurídica constitucional para defender el derecho a la paz y al desarrollo nacional”, sostuvo en su programa Maduro Live De Repente.
El mandatario indicó que la nueva ley fija los mecanismos para hacer justicia, “aún cuando los traidores se hayan ido del país. Si Washington aprieta, nosotros apretaremos más”.
El mandatario volvió a apuntar contra el Gobierno de Estados Unidos por las nuevas sanciones contra 21 funcionarios de venezolanos. “¿Por qué agreden a los jefes militares que pretenden sancionar? Porque garantizaron la paz el 29 y 30 de julio y derrotaron el plan fascista de los comanditos que mataron a 27 ciudadanos venezolanos honestos e inocentes”, aseveró.
“Nosotros, protegeremos al país y mantendremos la institucionalidad con la ley, el orden y las Instituciones. Sigamos construyendo consensos con el hombre y la mujer de a pie”, agregó.
Este jueves, la Asamblea Nacional aprobó la ‘Ley Orgánica Libertador Simón Bolívar contra el Bloqueo Imperialista y en Defensa de la República Bolivariana de Venezuela’, que también contempla multas de hasta un millón de euros para las personas que promuevan o estén implicadas en las sanciones extranjeras impuestas contra el Gobierno.
La norma, aprobada por unanimidad, incluye la inhabilitación política de 60 años de duración a quienes incurran en estos «delitos», lo que impedirá a los sancionados optar por cargos públicos o de elección popular.
Asimismo, tampoco podrán competir en elecciones quienes hayan «promovido, instigado, solicitado, invocado, favorecido, respaldado o participado en la adopción o ejecución» de «acciones armadas o de fuerza, así como ataques cibernéticos» contra el país, sus instituciones o autoridades, muchas de ellas sancionadas por otros países.
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