Bloomberg: EEUU prepara la salida de otras empresas petroleras de Venezuela

La administración Trump se prepara para obligar a más empresas petroleras a dejar de operar en Venezuela, en función de aumentar la presión sobre el presidente Nicolás Maduro después de ordenar a Chevron que ponga fin a sus operaciones en el país, según fuentes enteradas citadas por Bloomberg.

Según la información, funcionarios estadounidenses ya han advertido a otras empresas petroleras extranjeras con actividades en Venezuela, incluida la francesa Maurel & Prom y una compañía productora de asfalto dirigida por el magnate petrolero de Florida, Harry Sargeant, que tendrán 30 días para poner fin a las operaciones en la nación sudamericana.

Impedir que estas empresas trabajen en Venezuela supondrá un duro golpe para la asediada economía del país y presionará -dice Bloomberg- a Maduro, mientras Trump presiona para alcanzar un acuerdo sobre reformas democráticas y la aceptación de más inmigrantes procedentes de Estados Unidos.

La economía venezolana depende en gran medida del petróleo. Chevron y otras empresas más pequeñas a las que Washington ha concedido permiso para operar en el país han sido motores cruciales del crecimiento reciente, ya que la propia petrolera estatal venezolana tiene problemas, tras años de falta de inversión.

La administración Trump tiene múltiples asesores y funcionarios con diferentes puntos de vista sobre cómo abordar a Venezuela, y es posible que el presidente cambie de rumbo en el último minuto y permita que las compañías petroleras sigan trabajando en el mercado venezolano, dice la nota.

Otras empresas extranjeras con operaciones en Venezuela que esperan noticias sobre si EEUU revocará sus exenciones para operar en el sector petrolero del país sudamericano sin estar sujetas a sanciones son la española Repsol SA y la italiana Eni SpA.

Las empresas mixtas entre Chevron y Petróleos de Venezuela SA han aportado una cuarta parte de los ingresos totales del gobierno de Maduro en 2023 y 2024, según una estimación de la consultora Ecoanalítica.

Sin Chevron, la economía de Venezuela podría contraerse hasta un 7,5% este año, según el Observatorio Venezolano de Finanzas, un grupo privado de investigación.

Un asesor de Trump, Rick Grenell, visitó a Maduro en enero para reanudar las conversaciones directas, lo que llevó a la liberación de seis presos estadounidenses y al reinicio de los vuelos de deportación. Desde entonces, 166 migrantes venezolanos han sido devueltos desde EEUU, y el último avión llegó a Caracas el 20 de febrero.

Maduro restó importancia al impacto de que Chevron se viera obligada a poner fin a sus operaciones en Venezuela, al afirmar que «la producción no caerá ni un litro ni un barril».

NAM – Banca y Negocios