Conozca el origen de la historia de Santa Claus
En diferentes partes del mundo Papá Noel tiene múltiples nombres, San Nicolás, Santa Claus, Viejito Pascuero, Padre hielo, lo que no varía es la figura del abuelo barrigón, de tez rosada, vestido con traje rojo y larga barba blanca. Es el personaje más querido de la navidad por los niños y su historia siempre les resulta algo curiosa. Entonces ¿Quién es el señor al que miles de niños de todo el mundo escriben una carta contándole cómo se han portado un regalo para la noche de navidad?
Cuenta la historia que Nicolás de Bari, que luego se convertiría en San Nicolás, nació en el siglo IV en Patara, una ciudad del distrito de Licia, en lo que actualmente es Turquía, dentro de una familia rica y acomodada.
Desde su niñez, Nicolás destacó por su bondad y generosidad con los más pobres, preocupándose siempre por el bien de los demás. Siendo todavía muy joven, el muchacho perdió a sus padres, víctimas de una epidemia de peste, y se convirtió en el heredero de una gran fortuna. A sus 19 años, Nicolás decidió dar toda su riqueza a los más necesitados y marcharse a Mira con su tío para dedicarse al sacerdocio.
Allí fue nombrado obispo y se convirtió en santo patrón de Turquía, Grecia y Rusia. Además fue nombrado Patrono de los marineros porque, cuenta una historia que, estando alguno de ellos en medio de una terrible tempestad en alta mar y viéndose perdidos, comenzaron a rezar y a pedir a Dios la ayuda del santo, y las aguas se calmaron.
San Nicolás falleció el 6 de diciembre del año 345. Puesto que esa fecha está muy próxima a la Navidad, se decidió que este santo era la figura perfecta para repartir regalos y golosinas a los niños el Día de Navidad. Desde el siglo VI, se empezaron a construir templos en su honor y en 1087 sus restos fueron llevados a Bari, en Italia.
Posteriormente, en el siglo XII, la tradición católica de San Nicolás creció por Europa, y hacia el siglo XVII emigrantes holandeses llevaron la costumbre a Estados Unidos, donde se suele dejar galletas o pasteles caseros y un vaso de leche a Santa Claus.
El nombre Santa Claus se creó a raíz del nombre del santo en alemán, San Nikolaus. De ahí saldrá lo de ‘Claus’.
El aspecto de San Nicolás de Bari era muy distinto al que se le atribuye hoy: tenía complexión delgada y era de gran estatura. Y el hecho de que lo representen siempre con una bolsa y tenga la fama de repartidor de regalos se debe a que, en cierta ocasión, el santo tuvo conocimiento de que la hija de uno de sus vecinos iba a casarse y su padre no tenía dinero para la dote, por lo que decidió entregarle una bolsa con monedas de oro. Así, la boda pudo celebrarse y, desde entonces, cobró fuerza la costumbre de intercambiar regalos en Navidad.
Aunque la leyenda de Papá Noel sea antigua y compleja, y proceda en gran parte de San Nicolás, la imagen familiar de Santa Claus con el trineo, los renos y las bolsas con regalos es una invención estadounidense. En 1823, el escritor inglés Clement Moore escribió el poema ‘Una visita de San Nicolás’, imaginando que Papá Noel surcaba los cielos en un trineo llevado por, al menos, nueve renos – Rudolph, Donner, Blitcher, Cometa, Cupido, Brillante, Danzante, Centella y Zorro -, y no que repartía sus regalos a pie o montando en un caballo como se había aceptado hasta entonces.
Se cree, además, que los norteamericanos también fueron quienes le dieron su actual aspecto. En 1931, una conocida marca de refrescos encargó al caricaturista Thomas Nast que dibujara un Papá Noel humanizado y cuya imagen fuera más cercana a las personas para su campaña navideña. Así surgió el Papá Noel vestido de rojo, con cinturón y botas negras que permanece hasta hoy en el imaginario popular.
Esto consiguió que, además de ser un personaje entrañable de la Navidad, Santa Claus se convirtiera en casi una marca publicitaria, una garantía de éxito que las empresas podían utilizar para llamar la atención de los niños sobre sus productos. De hecho, como el investigador C. Michael Hall explica en su artículo titulado ‘Santa Claus, place branding and competition’ publicado por la revista de investigación Fennia, International Journal of Geography (volumen 186: No. 1, 2008), Santa Claus se ha convertido en la marca más potente del mundo. A menudo, se utiliza como un reclamo para promover el turismo navideño a zonas urbanas.
A día de hoy, la historia cuenta que Papá Noel vive en el Polo Norte acompañado de la señora Noel y de un grupo de duendes que son los encargados de fabricar los juguetes que desean los niños de todo el mundo. Cuando llega la noche del 24 de diciembre, Papá Noel carga todos sus regalos en un saco y recorre el mundo dejando los regalos de los niños debajo del árbol de Navidad.
NAM/Patricia Núñez