Listeriosis durante el embarazo: síntomas y cómo evitarla

La listeriosis es una enfermedad bacteriana que es causada por gérmenes que podemos encontrar tanto en plantas como en animales. También está presente en el suelo, pero además pocas personas saben que el propio microorganismo que causa la infección (conocido cientificamente como Listeria monocytogene) se encuentra además en nuestra flora intestinal normal. Sin embargo, cuando se sufre una disminución de la acidez gástrica y además se dan otras circunstancias que afectan a las funciones gastrointestinales puede crecer el riesgo de contraer la enfermedad. Por este motivo, es importante tener muy controlada este tipo de enfermedad especialmente si se está esperando un bebé. Descubramos ahora más sobre listeriosis durante el embarazo: síntomas y cómo evitarla.

Listeriosis durante el embarazo

Cuando una mujer descubre que está esperando un bebé empieza a experimentar una gran felicidad, pero también inicia un tiempo de preocupación. Sí, porque no dejará de pensar en cómo estará su pequeño y eso le llevará, entre otras muchas cosas, a vigilar su propia salud. En concreto, se hace necesario que controle su alimentación y que evite la ingesta de ciertos productos que se consideran que pueden entrañar peligro y provocar patologías varias como es la listeriosis

¿Qué es la listeriosis?

Bajo el nombre listeriosis se encuentra una infección de cierta gravedad que está causada por una bacteria llamada Listeria monocytogenes. Bacteria esta que se puede encontrar en ciertos alimentos tales como los embutidos, ciertos quesos, productos ahumados, salchichas…De ahí que sea fundamental evitar su ingesta durante el periodo de gestación

Además de los recién nacidos, se considera que quienes tienen más riesgos de sufrir esta infección son las embarazadas. ¿Por qué? Fundamentalmente porque, debido a los cambios hormonales que presentan, su sistema inmunológico se encuentra realmente mucho más debilitado frente a la bacteria que la provoca.

En concreto, los últimos estudios llevados a cabo vienen a dictaminar que tiene un 20 % más de probabilidades de infectarse que cualquier otra persona adulta que no está esperando un hijo.

De la misma manera, es importante conocer que la listeriosis también puede afectar al bebé, pues es capaz de “atravesar” la placenta.

Síntomas

Al igual que cualquier patología, quien esté afectado por la bacteria citada, presentará una serie de síntomas claro que vendrá a dejar patente que la sufre. En concreto, entre las señales más claras que sufrirá se encuentran las siguientes:

En el caso de las gestantes, lo habitual es que se muestre con las mismas que se experimentan cuando se sufre una gripe.

De la misma manera, pueden tener lugar desde fiebre hasta dolores de cabeza fuertes pasando por una notable rigidez en la zona del cuello, diarreas e incluso por pérdida del equilibrio o confusión.

Consecuencias

Si relevante es conocer qué es la listeriosis, cómo se infecta una persona o los síntomas que la indican, también lo es tener claras las consecuencias que trae consigo. Y es que quizás el ser consciente de las mismas puede llevar a poner más medidas para evitar contraerla.

En concreto, tenemos que exponer que esta infección puede provocar desde un aborto espontáneo hasta malformaciones en el feto pasando por partos prematuros. Eso sin olvidar que también existen casos en los que ha traído consigo muertes fetales o en los que ha provocado serios retrasos mentales en lo bebés.

La transmisión puede ocurrir por inhalación de líquido amniótico logrado, a través de la placenta o en el momento del parto si la vagina ha sido colonizada. La listeriosis neonatal ocurre en torno a 8,6/100.000 nacidos vivos (es decir, el 68 % de los niños nacidos de madres positivas para la infección). El pronóstico del recién nacido cuya madre contrajo listeriosis en el embarazo se caracteriza por una alta mortalidad (20-30%).

Tratamiento

Cuando una futura mamá sospecha que puede estar afectada por esta problemática, debe acudir de manera inmediata a su médico. Este le realizará distintas pruebas y si las mismas llegan a la conclusión de que el diagnóstico es positivo, se establecerán medidas inmediatas. En concreto, lo habitual es que se establezca un tratamiento sustentado en la ingesta de antibióticos, que no solo protegerán a la madre sino que evitarán que la situación afecte al feto.

Cómo prevenir la listeriosis en el embarazo

Dada la gravedad de la listeriosis, es fundamental que las embarazadas procedan a seguir una serie de medidas de prevención. ¿Cuáles? Sobre todo, controlar la ingesta de determinados productos y vigilar cómo toman otros. Esto es algo que deben llevar a cabo partiendo de estas recomendaciones:

Deben eliminar de su dieta todo tipo de alimentos crudos que tengan origen animal, como la carne y el pescado. Estos deben tomarlos siempre debidamente cocinados;

Es fundamental no tomar leche sin pasteurizar así como productos elaborados con la misma como el queso;

No menos relevante es que tanto antes como después de manipular alimentos crudos se laven adecuadamente las manos;

Se recomienda no tomar determinados quesos frescos o blandos como sería el caso del brie, el roquefort, el feta, el cabrales o el camembert, entre otros;

Por supuesto, es necesario que las verduras crudas que se vayan a tomar se laven a conciencia previamente. Para eso, se puede recurrir a determinados artículos “desinfectantes” que hay a la venta y que son específicos para alimentos. Una medida esta que también es aplicable a las frutas;

De la misma manera, hay que resaltar que las embarazadas deben evitar comer cualquier tipo de producto que esté caducado;

Todos los productos elaborados a partir de carne, como sería el caso de los embutidos, lo mejor es no comerlos. Y es que es la manera de evitar un riesgo innecesario;

Almacene los alimentos cocidos y crudos por separado;

Cumple con la fecha de caducidad impresa en el envase de los alimentos;

Cocina bien los alimentos antes de consumirlos;

Sigue las instrucciones de la etiqueta de los productos refrigerados, en cuanto a su óptima conservación ;

Mantén baja la temperatura del frigorífico, posiblemente por debajo de los 6 °C, para limitar la posible proliferación bacteriana;

Lava todos los utensilios que hayan estado en contacto con alimentos crudos (ollas, cubiertos) y, obviamente, también lávese las manos con frecuencia.

A grandes rasgos, estos son los datos más importantes que hay que conocer sobre la listeriosis. Con los mismos, se pueden tomar las medidas necesarias para evitar esta infección peligrosa para la gestante y para su bebé.

Las prácticas de difusión y las campañas de información sobre el tema de la inocuidad de los alimentos son fundamentales para reducir la incidencia de la listeriosis perinatal. Es importante que las mujeres embarazadas conozcan las normas de alimentación e higiene a implementar como medida preventiva.

Por OkDiario