Cuatro claves para saber más sobre la osteoporosis
¿Qué es exactamente la osteoporosis? Osteoporosis significa huesos porosos. Es una enfermedad que se caracteriza por una baja masa ósea y el deterioro de la «microarquitectura» del hueso. Estas dos condiciones conducen a una mayor fragilidad y un aumento del riesgo de fractura.
Su condición de enfermedad silenciosa y la necesidad de mejorar la prevención y el diagnóstico temprano motivaron la realización de Sirenas de Cristal, una miniserie de cuatro capítulos que busca educar sobre el impacto de la enfermedad.
Lo que no se diagnostica, no se trata Se suele decir que la osteoporosis es una «enfermedad silenciosa», ya que un gran porcentaje de quienes sufren al menos una fractura osteoporótica nunca son identificados. Y eso es, justamente, algo de lo que muestra Sirenas de Cristal: que el diagnóstico y el tratamiento temprano resultan fundamentales para prevenir las fracturas.
«Es importante detectar a las personas con factores de riesgo y facilitar su acceso a una evaluación completa e individualizada que permita tomar las medidas preventivas antes de que ocurra una fractura. Sin embargo, cuando el diagnóstico se realiza luego de una fractura, el tratamiento oportuno e interdisciplinario es fundamental para prevenir nuevas fracturas en el futuro», explica María Diehl, médica del servicio de Endocrinología del Hospital Italiano de Buenos Aires y representante de la Asociación Argentina de Osteología y Metabolismo Mineral (AAOMM) en la Red Argentina de Fractura de cadera (RAFCA).
La importancia del abordaje multidisciplinario En la osteoporosis el abordaje multidisciplinario desde el diagnóstico hasta el tratamiento es de gran relevancia. Es clave el trabajo en equipo de los especialistas en traumatología, clínica médica, geriatría, endocrinología, reumatología, osteología, nutrición y kinesiología, entre otros. De esta forma se va a lograr un cuidado centrado en el paciente y la prevención de fracturas que muchas veces generan pérdida de la independencia y mayor mortalidad», agrega Diehl.
Una forma de abordar el tratamiento interdisciplinario luego de una fractura es la implementación de los Fracture Liaison Services (FLS, por sus siglas en inglés). Los FLS son unidades de coordinación de fracturas que funcionan en clínicas y hospitales bajo ciertos estándares. Han demostrado ser costo-eficaces para reducir nuevas fracturas y mejorar la calidad de vida.
Cuatro aspectos de la osteoporosis para no perder de vista.
1) Conocer los factores de riesgo y los hábitos de prevenciónLa osteoporosis es más frecuente en mujeres, pero no olvidemos que los hombres también pueden padecerla. Se estima que una de cada tres mujeres y uno de cada cinco hombres mayores de 50 años van a presentar una fractura. Así lo revelan las estadísticas de la International Osteoporosis Foundation.
También hay otros factores de riesgo como el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol, el sedentarismo y los antecedentes familiares de fracturas.
En contrapartida, es importante insistir con la adopción de hábitos saludables. Los ejercicios de fortalecimiento muscular y aquellos que mejoran el equilibrio son necesarios para mantener la densidad ósea. También mantienen la función muscular, una buena postura y disminuir el riesgo de tener una caída.
2) Después de una fractura es necesario hacer siempre una evaluación clínica completa Hay quienes después de sufrir una fractura piensan que esta ocurrió únicamente por el impacto de la caída, cuando en realidad en la fractura interviene no solo el traumatismo, sino que también en algunos casos influye la fragilidad ósea. De hecho, la mayoría de las fracturas se producen por una caída desde la propia altura, que no generaría una fractura en un hueso con resistencia normal.
Si bien la intervención del traumatólogo es fundamental para tratar la fractura, el seguimiento multidisciplinaria posterior es clave para el diagnóstico y tratamiento adecuados. «Lo importante es que la osteoporosis se trate, y que se realice de forma individualizada. Hay que evaluar los factores de riesgo, las enfermedades crónicas concomitantes y las alteraciones en la marcha», dice la experta Diehl.
También advierte Diehl que las fracturas vertebrales pueden producirse incluso en ausencia de una caída previa. Pueden ocurrir al levantar un peso excesivo para esa persona. «Sin una radiografía ese dolor se puede interpretar como de origen muscular. Y eso es un problema, porque quien sufre una fractura tiene mucho riesgo de sufrir nuevas fracturas si no se diagnostica y no se trata».
3) Una densitometría lleva solo quince minutos La osteoporosis se puede diagnosticar a través de un estudio indoloro y no invasivo denominado densitometría ósea. Está recomendada en mujeres mayores de 65 y en hombres mayores de 70 años. Sin embargo, ante la presencia de factores de riesgo o fracturas previas este estudio se puede indicar también en etapas más tempranas.
4) Aprender a evitar las caídas es esencial 30% de los adultos mayores de 65 años presenta al menos una caída en el año y algunas de ellas pueden producir fracturas u otras lesiones.
La mayoría de las fracturas de cadera ocurren luego de una caída en el propio domicilio del paciente.
Por eso es clave tomar todas las medidas que faciliten la seguridad en el espacio doméstico, desde dejar una luz tenue encendida a la noche y fijar los bordes de las alfombras hasta eliminar cualquier hilo o cable sobrante.
También hay que tener cuidado con las mascotas que podrían cruzarse bruscamente. Y por último: usar un calzado adecuado, esperar siempre arriba de la vereda para cruzar la calle y saber pedir ayuda para tareas que pueden parecer sencillas pero resultan a veces riesgosas.
Ante el aumento de la expectativa de vida las fracturas por osteoporosis son un problema cada vez más frecuente y que afecta significativamente la calidad de vida. Es importante detectar a la población de riesgo para prevenirlas y ante una fractura iniciar rápidamente la evaluación y el tratamiento.
Con información El Nacional