Un buzo fue mordido por un pez «con dientes humanos»
Alex Pikul, de Alabama Estados Unidos, se encontraba junto a otros siete buceadores más en la costa de Sharm El Sheikh, en Egipto. Todo transcurría con normalidad cuando el grupo, encabezado por Maira (propietaria de Mar Hosted Trips) tuvo que cambiar de rumbo por una fuerte corriente.
Pero este desvío derivó en que el grupo termine nadando sobre un nido de huevos y aparezca un pez ballesta macho en escena. Esta especie de animal acuático, que se encuentran en aguas tropicales y subtropicales, lleva ese nombre por su naturaleza agresiva y protectora en cuanto a sus crías y esta no fue la excepción.
El pez comenzó a perseguirlos en defensa de su especie hasta que ahuyentó al grupo de buceadores, sin embargo, volvió hacia uno de ellos, quien tenía pantalones cortos y le mordió la pierna derecha.
“Yo pensé que estaba a salvo porque el pez ballesta se alejó nadando, así que me di la vuelta y me alejé nadando siguiendo al resto del grupo, pero de repente me mordió la pierna”, señaló Alex Pikul en diálogo con The Sun.
“Por la forma en que lo sentí, pensé que probablemente me rompería la piel y estaría sangrando; puedes escucharme gritar algunas malas palabras bajo el agua”, señaló y luego añadió: “He visto peces ballesta antes, pero cuando vi el video de su regreso, pensé que era divertido: nunca te acercas tanto a una toma de cómo se ven sus dientes”.
“Se ven demasiado grandes para su boca, casi como si tuviera dentadura postiza o algo así”, describió el buzo norteamericano, pero el episodio se lo tomó con bastante relajado: “La mordedura dejó un moretón y una roncha en forma de dientes por el resto del viaje, lo cual fue bastante divertido”.
A Alex Pikul le sucedió una de las cosas más terribles que pueden ocurrir dentro del mar, no obstante, su pasión por las aguas y los animales hizo que se lo tomara con soltura, aunque tuvo la marca de los dientes en su piel durante días y un video viral que no olvidará jamás.
En cuanto a los peces ballesta, hay alrededor de 40 especies diferentes y en su mayoría son de colores brillantes. Según National Geographic, los peces ballesta utilizan sus “dientes y mandíbulas muy duras para atrapar erizos de mar, volteándolos para llegar a sus vientres, que están armados con menos espinas”. Pero también destierran cangrejos y gusanos a los cuales encuentran sacudiendo los escombros con sus aletas. Por ende, es muy peligroso pasar cerca de un nido de estos peces.
Con información de Sabelo