EEUU reitera sanciones «si Nicolás Maduro no cumple con sus compromisos»: El Nuevo Herald
La administración de Joe Biden en EEUU cumplirá con su promesa de volver a imponer sanciones contra el gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela a menos que Caracas tome medidas concretas a más tardar el jueves para liberar a los rehenes estadounidenses y dar inicio a un proceso de reformas democráticas.
Así lo ha dicho un funcionario de la Casa Blanca y reseñado luego por El Nuevo Herald.
La Casa Blanca alivió las sanciones al sector petrolero del país el mes pasado después que Maduro alcanzara un acuerdo tentativo con líderes de la oposición venezolana en aras de realizar elecciones presidenciales competitivas el próximo año.
EEUU reitera sanciones para Venezuela «si Nicolás Maduro no cumple con sus compromisos»
Pero los funcionarios de la administración Biden establecieron dos condiciones para levantar las sanciones de Estados Unidos en ese momento y le dijeron a Maduro que tenía que cumplir ambas antes del 30 de noviembre.
Maduro primero debe “comenzar la liberación” de todos los rehenes estadounidenses actualmente detenidos en el país, según un comunicado difundido por la Casa Blanca.
Tres ciudadanos estadounidenses están bajo detención en Venezuela
En segundo lugar, Maduro debe “definir un proceso y un cronograma de pasos específicos para la reinstalación acelerada de todos los candidatos” que quieran postularse para la presidencia, garantizando su libertad de movimiento y seguridad física.
Juan González, director senior para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, declaró públicamente que esto debe incluir a María Corina Machado, quien es ampliamente considerada como la dirigente opositora con mayores opciones de vencer a Maduro en las elecciones.
Un funcionario de la Casa Blanca dijo el martes que la administración está comprometida con la fecha límite del 30 de noviembre. “Nuestra declaración sigue siendo válida”, dijo el funcionario.
El gobierno estadounidense ha estado esperando que desde Caracas cumplan con los compromisos que asumió en una serie de negociaciones celebradas a lo largo del año con miembros de la administración Biden.
Las conversaciones culminaron con la firma el mes pasado en Barbados de un acuerdo con líderes de la oposición para celebrar elecciones presidenciales el próximo año.
Esos compromisos incluían permitir que cualquier líder de la oposición compitiera, implementar reformas profundas al sistema electoral venezolano, permitir que los observadores internacionales supervisen los comicios, y liberar a todos los presos políticos.
A cambio, la administración otorgó una licencia general de seis meses que autorizaba temporalmente transacciones estadounidenses relacionadas con el sector de petróleo y de gas en Venezuela, y una segunda licencia general que autorizaba las operaciones de la estatal Minerven, una empresa minera de oro previamente sancionada que había estado comercializando.
Según informes de prensa, Maduro ya ha tomado medidas para aprovechar las nuevas licencias, estableciendo una serie de acuerdos tentativos con compañías petroleras internacionales para impulsar la producción del país.
Además de la española Repsol y la italiana Eni, que ya trabajan con Venezuela en proyectos de gas desde hace algún tiempo, la empresa francesa Maurel & Prom anunció que reanudará sus operaciones en el lago de Maracaibo, en el este de Venezuela, informó el diario español El País.
Otras empresas que buscan regresar al país sudamericano incluyen China Petroleum e Indian Oil, que ya se han puesto en contacto con Caracas, mientras que funcionarios de Maduro han confirmado conversaciones para desarrollar proyectos de gas con la colombiana Ecopetrol.
No obstante, narran, Maduro ha dado pocas señales de estar dispuesto a cumplir su parte del acuerdo de octubre con Washington.
En lugar de levantar la prohibición que impedía a varios altos líderes de la oposición postularse para cargos público, el gobierno venezolano, a través de su Corte Suprema, emitió un nuevo fallo que desmantela los resultados de una elección primaria celebrada por la oposición el mes pasado, en el que Machado obtuvo más del 92% de los votos.
Esto fue visto en Estados Unidos como una señal de que Maduro no tiene intención de cumplir su palabra. “Les tomó sólo dos semanas violar” el acuerdo, dijo el senador estadounidense de la Florida Marco Rubio al secretario de Estado Antony Blinken en una audiencia reciente en el Senado.
“Cancelaron las elecciones primarias de la oposición y continúan prohibiendo al ganador de las primarias. Básicamente borraron las elecciones. Han roto el trato. ¿Vamos a volver a imponer sanciones?” preguntó el senador.
Esa opción está sobre la mesa, respondió Blinken. “No están obteniendo permiso para tomar acciones que contradicen los compromisos que han asumido para avanzar hacia elecciones libres y justas”, dijo. “Estamos siguiendo esto con mucho cuidado”.
Con información de El Nuevo Herald