El estado de salud de Javier Tarazona ha empeorado.


Clara Ramírez, defensora de derechos humanos y miembro de la organización no gubernamental Fundaredes por la liberación de Javier Tarazona, director de la ONG. Afirmó que la salud del ciudadano, privado de la libertad desde hace más de 920 días, se deteriora visiblemente.

En entrevista con Aula Abierta, dijo queLa salud del profesor universitario Javier Tarazona empeora. Recordó que antes de su detención padecía enfermedades cardiovasculares y respiratorias, «pero hoy padece 10 patologías».

Indicó que a sus 41 años toma 19 medicamentos todos los días. Explicó que actualmente padece hipertensión arterial, arritmia cardíaca, síndrome cardiometabólico, asma, taquicardia, insuficiencia venosa grado 2, psoriasis, fisura rectal y neumonía atípica.

“Desde 2021 hemos alertado sobre las torturas y tratos crueles que sufrió Javier en prisión. En 2022 tuvimos derecho a hablar ante el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas para decir que Javier ha sido víctima de torturas, crueles y tratos degradantes y el Estado venezolano no ha iniciado investigaciones al respecto”, agregó Ramírez.

El 19 de diciembre Fundaredes denunció la postergación del juicio oral y público, que estaba previsto para entonces, pero fue suspendido hasta el 9 de enero. Tarazona permanece detenido en el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en El Helicoide, en Caracas.

Tarazona, víctima de una “demora procesal”, según organizaciones y abogados, fue detenido el 2 de julio de 2021 cuando acudió a la Fiscalía de Coro, capital del estado Falcón, para manifestar que era víctima de acoso y persecución por parte de los funcionarios de la Policía de esa región, agentes del Sebin y personas no identificadas, según informó la ONG en su momento. Posteriormente, fue imputado por los delitos de instigación al odio, terrorismo y «traición».

El activista denunció activamente un conflicto entre la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y disidencias de las FARC que se desarrolló en una zona fronteriza con Colombia ese año, ante la falta de datos oficiales.

Con información de Venezuela Visión