CLAP Generación de Oro produce para ayudar al pueblo merideño
La región andina sigue encaminada hacia el sistema productivo y como factor determinante se encuentra el Gobierno bolivariano que dirige el presidente de la República, Nicolás Maduro, a través del Ministerio del Poder Popular para Alimentación (Minpaal) y en Mérida, bajo la administración del gobernador Jehyson Guzmán, mediante el Estado Mayor de Alimentación (EMA) se impulsa la producción agroalimentaria de la mano con el poder popular.
Una de las experiencias productivas en el estado Mérida a través de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) queda plasmada en el CLAP Generación de Oro, que agrupa a doce parceleros y siembras de alrededor de cuatro hectáreas, donde, con ímpetu, mística y gallardía, se hace frente a la guerra económica con trabajo productivo en la comunidad José Adelmo Gutiérrez, parroquia Matriz del municipio Campo Elías.
La lideresa de Comunidad CLAP, Esmeralda Flores, señaló que tomando la iniciativa de la ‘P’ de Producción, ayudan al pueblo directamente y benefician alrededor de 490 familias con productos a precios solidarios, así como para el consumo propio de sus familiares con rubros, tales como caraotas, maíz, limón, piña, parchita, yuca y caña de azúcar.
Al respecto, Albertina Torres de León, quien ha dedicado gran parte de su vida a la agricultura, de la mano con su esposo, señaló que desde muy temprano salen de sus casas a trabajar la tierra. “A mí me gusta mucho trabajar el campo y hemos sacado bastantes cosechas, prácticamente estamos todos los días de la semana trabajando: desyerbando, limpiando las matas, regando, aunque tenemos dificultad con el agua para el riego, pero no descansamos para beneficiar a la gente”, expresó.
La escuela del campo
El productor y maestro del campo, Ponciano Guillén, destacó que bajo la novedad “Trabajar para ayudar al que no puede sembrar”, se busca incentivar a los más jóvenes para inculcar el amor por el trabajo de la tierra. “En la ciudad todos conocen cómo es una zanahoria, pero la mayoría no sabe cuál es la mata, siempre la escuela es el campo, enseñamos a cómo sembrar, cuidarla y cosecharla”.
Finalmente, dijo que con la fe en Dios aspiran a que el Gobierno bolivariano les brinde el apoyo con mangueras para mejorar el sistema de riego.
NOTA DE PRENSA
