El Ejército de Israel ataca edificios en donde Hizbulá almacena armas en Beirut
El Ejército de Israel atacó en la madrugada de este sábado edificios en un suburbio de Beirut donde estima que Hizbulá almacena misiles.
El ataque ocurrió pocas horas después de que el portavoz castrense israelí, Daniel Hagari, dijera que dicho ataque era inminente y buscaba destruir las “capacidades estratégicas” de Hizbulá en el corazón mismo de su bastión en Beirut.
Hagari señaló que las autoridades israelíes se pusieron en contacto con los residentes de tres edificios en el suburbio de Dahye para pedirles que evacuaran el lugar por su seguridad.
Según Hagari, debajo de dichos edificios Hizbulá almacena misiles tierra-mar que amenazan el transporte marítimo internacional.
El portavoz en árabe del Ejército israelí, Avichay Adraee, también había urgido en X a residentes de este suburbio, donde Israel bombardeó la tarde del viernes la sede central de Hizbulá en un ataque masivo, que evacuen o se distancien “al menos 500 metros” de los tres edificios.
Las fuerzas de defensa israelíes también informaron del inicio de un ataque contra Hizbulá en la zona de Tiro, en el sur del Líbano.
La noche del viernes, Israel identificó el lanzamiento de unos 65 cohetes contra el norte del país, tras el ataque contra Beirut.
En una primera andanada, una treintena fueron dirigidos contra la norteña urbe de Safed, la mayoría interceptados, con al menos dos impactos directos contra una casa vacía y un vehículo, informó el Ejército.
Unos veinte minutos después, otros 30 cohetes fueron lanzados en la región de la Baja Galilea, y minutos más tarde, otros cinco en dirección a la Galilea Occidental, algunos de los cuales interceptaron y otros impactaron en zonas abiertas, según el Ejército.
El viernes, enormes columnas de humo se elevaron en los suburbios meridionales de Beirut, conocidos como el Dahye, mientras que fuertes explosiones resonaron tanto en esta urbe como en poblaciones adyacentes, algo que no había ocurrido con ninguno de los bombardeos israelíes previos desde octubre.
Según filtraron fuentes de seguridad israelíes a la prensa local, bajo anonimato, el objetivo del ataque era asesinar al líder de Hizbulá, Hasán Nasrala, cuyo paradero y estado de salud aún se desconocen.
El Ministerio de Salud del Líbano indicó que ese ataque dejó un saldo de 6 muertos y al menos 91 heridos.
Información de EFE