Fedecámaras estima crecimiento de 10% en 2024 pese a caída de la producción y del empleo
La Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción (Fedecámaras) presentó los resultados de su primera Encuesta Cualitativa Empresarial, correspondientes al tercer trimestre de 2023. Las empresas encuestadas pronostican crecimiento en 2024.
Empresas de un total de 97 gremios establecieron sus estimaciones para 2024, dando como resultado una expectativa promedio de 10,4% de crecimiento del sector privado de Fedecámaras, que representa aproximadamente 65% del Producto Interno Bruto (PIB).
Al ser cuestionado al respecto, el presidente de Fedecámaras, Adán Celis, argumentó que estas tasas de crecimiento que podrían ser consideradas altas son posibles debido a que la base a partir de la cual se crece es extremadamente baja.
«Tomando las medidas adecuadas, se pueden lograr esos números porque la base es muy baja. Cualquier impacto en la economía tendrá un efecto importante. Además, tenemos que ser optimistas», razonó en una rueda de prensa celebrada este lunes 22 de enero en la sede de Fedecámaras, en Caracas.
Este promedio está impulsado en gran medida por un crecimiento esperado de 24,5% en el sector de los servicios inmobiliarios y otro 24,7% del turismo. La construcción (10,6%), construcción (10%), agricultura (9,3%) y comunicaciones (1,7%) marcan las demás perspectivas de crecimiento para 2024.
Estos números, hipotéticos, serían esperanzadores para el sector empresarial, especialmente tomando en cuenta que los los resultados de la encuesta señalan que en 2023 se acumularon tres trimestres seguidos de contracción.
Los datos de la patronal indican que el primer trimestre registró una caída de 7,3%, el segundo de 8,8% y el tercero de 4,8%; en contraste con 2022, cuando se produjeron avances de 11,7% y 12,1% en los dos semestres de ese año.
A esta caída productiva se le suma también un retroceso en el empleo formal. Debido a la caída de la economía, los puestos de trabajo también se redujeron en el transcurso de 2023.
El retroceso fue de 2,3% en el primer trimestre, de 3,5% en el segundo y de 3,7% en el tercero; datos que cuentan con una connotación incluso más preocupante cuando se toma en cuenta que en 2020, durante la pandemia, el empleo cayó 31,9% y en 2021 otro 16,5%. El único leve crecimiento registrado en materia de empleos se evidenció en 2022, con aumentos de 2,1% y 2,3% en cada semestre de ese año. La caída es mucho más significativa que el crecimiento.
Considerando este precedente negativo en 2023, las expectativas de crecimiento en 2024 se centran en posibles mejoras estructurales que podría experimentar la economía este año, ante la flexibilización de sanciones y posibles reformas normativas que generen un mejor ambiente para la inversión.
Dentro de estos cambios que tendrían que implementarse para que estas expectativas tengan sentido, Fedecámaras destaca la importancia del financiamiento bancario, casi inexistente en Venezuela por un marco legislativo y una política monetaria que merman la actividad crediticia.
Para las empresas encuestadas, la mayor barrera para operar en el país es la ausencia de financiamiento, a lo que le sigue la crisis de los servicios públicos, la presión fiscal, el entorno macroeconómico y los problemas de distribución de combustible.
«El financiamiento es lo que potencia la economía. Si usted tiene un negocio y cuenta con capital propio. Si queremos una economía más grande, tenemos que resolver de inmediato el problema del financiamiento», resaltó Celis.
En este sentido, el gran reto para la industria nacional este año es recuperar la capacidad ociosa que se sitúa en un promedio de 75%. Para Celis, este desuso de capacidad instalada se traduce en oportunidades de inversión.
Sin embargo, para que estas oportunidades se concreten deben aplicarse medidas que incentiven la inversión, especialmente la extranjera. Con la flexibilización de sanciones, las esperanzas están puestas en una mayor captación de inversiones.
«Hay oportunidades, por eso tenemos que seguir viendo cómo esas medidas económicas y que se cambie ese marco jurídico para pasar a uno mucho más amigable a las inversiones, y que con ello venga más empleo, más ingresos, más capacidad de compras; adicionalmente al tema de las sanciones, que esperamos que se siga flexibilizando», agregó.
En octubre de 2023 Washington aprobó una flexibilización de sanciones mediante una serie de licencias que autorizaban operaciones en el sector petrolero. Estos permisos tendrían una vigencia de seis meses renovables, por lo que, en teoría, se vencen en abril de este año. Sin embargo, los empresarios creen que se va a mantener la medida.
El corte de esta encuesta de Fedecámaras se produjo poco antes de que se otorgara la flexibilización. Hasta ese momento, 81% de las empresas encuestadas indicaban que eran afectadas por las sanciones de Estados Unidos.
Con información de Tal Cual