Gobernación ejecuta Plan de Acción contra la malaria en Comunidades del Tokuko en Perijá
En el marco del Plan de Acción que emprende la Gobernación del Zulia contra la Malaria, en el municipio Machiques se desplegó una extensa jornada de salud y saneamiento ambiental en las comunidades de la cuenca del Tokuko, en la Sierra de Perijá.
En tal sentido, la secretaria de Salud del estado Zulia, María Moreno, expresó que la programación de las cuadrillas de la Dirección Regional de Ambiente son dirigidas por Heraclio Moreno, quienes desarrollan, a cabalidad, las políticas públicas de la Gobernación del Zulia, en materia de prevención en los distintos municipios de la región, en especial la ejecución de fumigación en la zona, ubicada en la Sierra de Perijá, ya que es un área de riesgos de enfermedades endémicas, propagadas por vectores (insectos), como la malaria.
Detalló que durante la actividad se realizó la entrega de tratamientos para la malaria, además, se practicaron más de 100 pruebas rápidas a los habitantes de las distintas cuencas, a fin de garantizar el control y seguimiento de la enfermedad en la población indígena. También se abordaron las distintas comunidades de la etnia yukpa, atendiendo a los sectores Virgen del Carmen, Santa Teresita, Santo Domingo, San Francisco, Santa Ana y Marewa de esa localidad.
En horarios especiales de 4:00 de la madrugada y 8:00 de la mañana y 8:00 pm a 11:00 de la noche se cumplió la jornada de saneamiento, quedando protegidas 11.800 casas en la Sierra de Perijá, con la jornada de nebulización. Al mismo tiempo fueron abordados con el programa de parasitosis, beneficiando a más 1.800 personas de esa población.
Entre una de las recomendaciones para evitar la malaria se recomienda dormir bajo la protección de un mosquitero y uso de insecticidas, para prevenir la picadura del mosquito transmisor. El paludismo es una enfermedad parcialmente mortal, pero es prevenible y curable. Los síntomas que manifiesta la enfermedad son fiebre alta, dolores intensos de cabeza, escalofríos. Estos suelen aparecer 10 ó 15 días después de la picadura del insecto.