Jefa de la Emergencia Pediátrica del SAHUM: Fuegos Artificiales, de la eufórica alegría a la inevitable tragedia de Fin de Año
La doctora Maruja Mora de Peña, Jefa del Servicio de Emergencia Pediátrica, del Servicio Autónomo Hospital Universitario de Maracaibo (SAHUM) hace un llamado a la prudencia; en lo relativo a los niños de la casa y los fuegos artificiales, que se acostumbran en las fiestas navideñas, sobre todo al final del año.
Fue clara al señalar “las situaciones que ocasionan el uso los juegos pirotécnicos en las fechas decembrinas, pueden ser motivo de alegría y placer; siempre y cuando, los adultos se hagan responsables y no permitan que los menores manipulen sin supervisión. Mucho cuidado, en aquellos hogares que tienen problemas con el suministro de gas doméstico y para cocinar utilizan leña o fogones, ya que en un descuido los pequeños pueden lesionarse gravemente”, advirtió.
Los casos de quemaduras y mutilaciones se incrementan para las fiestas de fin de año, destacó.
Graves consecuencias que se pueden evitar
Alertó e insistió a los padres de los menores de edad “no los deben dejar manipular juegos pirotécnicos sin supervisión, porque eso trae consigo: pérdida de dedos, lesiones oculares, quemaduras de 1er, 2do y 3er grado, en cara, pecho, extremidades superiores y cicatrices; además, no es solo el hecho de explotar, son los químicos también, puesto que si quedan restos de esos fuegos artificiales en el piso el niño busca un fósforo, lo prende y sucede la desgracia; por otra parte, si ingieren el contenido de fósforo, como por ejemplo de las conocidas “cebollitas” a los 2 o 3 días provocan insuficiencia hepática y se mueren. El riesgo también es de envenenamiento; quemaduras que ameritan hospitalización, hasta perdidas de dedos y manos, las estrellitas también son peligrosas si toman la tela de la vestimenta y ocasionan quemaduras”.
Consecuencias
Ratificó, que las consecuencias son: alteraciones oculares, auditivas y las quemaduras en cara, cuello, extremidades ; e insistió,
“se debe estar muy pendientes con las “cebollitas” y las “estrellitas” (Luces de Bengala).
Los primeros auxilios son imprescindibles, tenemos que tomar al niño quitarle la ropa, envolverlo en una sábana limpia, tratar de calmarlo y acudir a la institución de salud más cercana para ser tratado y atendido.
Disfrutar es lo deseado, así que no permitamos que un descuido se transforme en una desgracia familiar”, finalizó.
Nota de Prensa