“La cabeza no es sólo para pelo”
Así hubiera dicho mi abuela Margarita: la cabeza no es solo para el pelo.
Pablo usó su conocimiento bíblico y su estatus migratorio para cumplir la voluntad de Dios.
Primero, cuando estaba a punto de ser azotado, preguntó si era lícito azotar a un ciudadano romano sin antes hacer de él condenado.
Esto hizo que el propio tribuno detuviera por temor el castigo que se le había impuesto.
Después estando ante la acusación de los fariseos, los sacerdotes y el concilio busco la manera de salir ileso dándose cuenta que en el auditorio había diferentes posturas teológicas en cuanto a la enseñanza de la Resurrección.
Así que provocó una discusión entre dos bandos, los fariseos y saduceos, esto hizo que su juicio quedará cancelado hasta el otro día.
Horas después se enteró por su sobrino que querían asesinarlo y pidió a un centurión que lo dejara ir al tribuno para dar la información y no permitir que su muerte se hiciera realidad.
El tribuno por temor y recordando que Pablo era ciudadano romano, tomó la decisión de sacarlo apresuradamente de la prisión y llevarlo ante Félix el gobernador, sano y salvo.
Pablo estaba sacando provecho de su nacionalidad romana y su conocimiento teológico, para hacer cumplir las palabras del Señor que le había dicho estando en prisión: Ten ánimo, Pablo como has testificado de mí en Jerusalén, así es necesario que testifiques también en Roma. Hechos 23
¿Estamos usando todos los recursos disponibles para hacer la obra de Dios?
¿Estamos sacando ventajas de nuestros enemigos usando el conocimiento de Dios y los derechos que tenemos en la sociedad donde vivimos?
Señor ayúdanos a permanecer en tu obra y cumplir tu voluntad en cualquier circunstancia.
Palabras claves: Sabiduría, Conocimiento, Predicación, Perseverancia
Hechos 20:26-27; Ezequiel 2:3-3; Mateo 4:23; Hechos 28:31; 1 Corintios 1:22-24