La migración venezolana manda menos remesas al país y reúne a más familias en el exterior
El perfil de la migración venezolana cambia conforme pasan los años. En siete años de crisis, la Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi) proyecta que se mantiene el flujo de salida del país –que suma más de cinco millones de emigrantes–, aunque con cambios en la frecuencia de envío de remesas y en las razones para emigrar.
Anitza Freitez, coordinadora del proyecto Encovi, dijo que aún se observa que la migración no es un problema resuelto y que difícilmente se recuperará la población perdida, ya que no es probable que se produzcan flujos de retorno tan grandes como los de salida.
“No tendremos ese retorno porque otro proceso migratorio sería muy costoso”.
La coordinadora explicó que se demostró un movimiento circular de retorno inestable. “Las personas se integraron a los países de destino”.
Migrantes hombres
En Venezuela se perdió la ventaja que suponía tener a personas en edad laboral que potenciarán el desarrollo del país, en principio migraba la población más joven. Pero ahora el rango de edad aumentó.
En las encuestas realizadas entre julio y agosto de 2022 la Encovi observó que en la población migrante mantiene la preeminencia de los hombres, menos jóvenes, en edades comprendidas entre los 30 y 49 años de edad. En el 2017 estaba más representado por el grupo de 15 y 29 años de edad.
La plataforma interagencial R4V estima en 7,1 millones la suma de personas refugiadas, migrantes y solicitantes de asilo venezolanas alrededor del mundo.
Hasta septiembre de 2022, Colombia, Perú y Ecuador albergaban a la mayor cantidad de migrantes venezolanos (más de 4,5 millones entre los tres), aunque este año se ha reportado un mayor flujo migratorio hacia Estados Unidos, en busca de mejores oportunidades laborales.
Reagrupación familiar
Freitez mencionó que 75 % de los venezolanos migraron principalmente para buscar empleo en otro país. Sin embargo, la reagrupación familiar tomó relevancia.
“El predominio de los que migraban eran hijos, pero ahora es el jefe del hogar , así que se van todos para reunir a la familia”, dijo.
Al menos 25 % de la población que abandonó Venezuela no contaba con un empleo, esto se redujo 16 % al llegar a su país destino.
La Encovi reveló que la migración de personas con escolaridad alta disminuyó en 2022, en su lugar aumentó el número de personas con educación media o primaria.
La reagrupación impacta en remesas
El envío de remesas a hogares venezolanos, tanto en cantidad como en periodicidad, se redujo en 2022 con respecto al año anterior. De acuerdo con la Encovi, 51 % de los migrantes venezolanos no envía remesas a sus hogares de origen.
La investigación refiere que en 2022 aumentó la proporción de migrantes que redujo la cantidad y frecuencia de las ayudas que envían a Venezuela (37 % vs. 21 % en 2021). Mientras que 29 % de los migrantes consultados reportó que dejó de enviar ayudas, bien sea en dinero como en bienes.
El envío de remesas a Venezuela comenzó a aumentar de forma importante en 2017, año caracterizado por ser el inicio del proceso de hiperinflación que se prolongó hasta 2021 y en el que se vivieron hasta cinco meses de tensiones políticas y protestas antigubernamentales. Ambos eventos, junto con la escasez y el desempleo, provocaron el éxodo masivo de venezolanos que se aceleró al año siguiente.
De acuerdo con estimaciones de la consultora Ecoanalítica, en 2017 ingresaron cerca de $1000 millones en remesas al país. Al año siguiente aumentó a $2500 millones y subió a $3500 millones en 2019. La pandemia de COVID-19 hizo que en 2020 la cifra cayera $1500 millones y desde entonces sigue en ascenso.
En 2022 Ecoanalítica estima que Venezuela podría cerrar con ingresos aproximados de $2500 millones a través de remesas. Organismos como el Banco Mundial proyecta aumentos en las remesas a nivel mundial, conforme se recupera el empleo y la actividad económica en los países de origen.
En 2021, la Encovi determinó que las remesas representaron entre 13 % y 24 % de los ingresos no laborales en hogares venezolanos, con mayor impacto en los hogares no pobres.
La consultora privada Anova Policy Research estimó que más de 2,4 millones de hogares reciben remesas (24 % del total) y el monto promedio de envío es de $65,8 al mes por hogar.
La investigación de Anova calcula que, si bien los hogares más pobres reciben apenas $26 en remesas al mes, su contribución es mayor si se compara con los ingresos mensuales que perciben las familias más desfavorecidas. De hecho, puede superar al aporte de ingresos laborales (salarios) y no laborales (bonos y transferencias del Estado).
Freitez sugirió al Gobierno Nacional dejar de estigmatizar el proceso migratorio, en su lugar se debe brindar la protección que las leyes garantizan, así mismo dijo que el pasaporte no debe tener un costo tan elevado.
Añadió que no se espera un regreso masivo porque no existen las condiciones, además recalcó que los migrantes retornados no superan 6 %.
Por Cronica Uno