La ONU denunció el aumento de la opresión contra las mujeres en Afganistán: “Están cada vez más cerca de ser eliminadas”
Las autoridades instaladas por el régimen talibán tras hacerse con el control de Afganistán en agosto de 2021 han mermado los derechos de las mujeres y las niñas en el país centroasiático con la aplicación de numerosas restricciones a sus derechos y libertades, como su exclusión de la vida pública, con motivo de la aplicación de su versión rigorista del islam, lo que las ha situado como las principales víctimas de una “opresión institucionalizada”.
La oleada de directrices impuestas por los fundamentalistas han despojado a las mujeres y las niñas de sus derechos y su dignidad. “Con cada restricción, se ven cada vez más excluidas de la vida pública, y más cerca de ser eliminadas por completo”, denunció ONU Mujeres en el cuarto aniversario de su llegada al poder.
“Estas restricciones no son temporales, ninguna se ha revertido. La crisis de derechos de las mujeres más grave del mundo se está normalizando”, avisó entonces, recordando que la situación de los derechos de las mujeres en Afganistán han convertido al país en el segundo con mayor brecha de género del mundo, solo superado por Yemen.
Mediante decretos, les han privado de los derechos a la educación, privacidad y vida familiar, así como a la libertad de circulación, expresión, pensamiento, conciencia y religión. “Otras personas han sido atacadas porque ciertas expresiones de sexualidad o identidad de género se consideran incompatibles con la política talibán en materia de género”, dijo el Tribunal Penal Internacional (TPI) cuando en julio emitió órdenes de arresto contra los líderes talibán por crímenes de lesa humanidad cometidos contra mujeres.
Por su parte, el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas ha aprobado esta semana una resolución presentada por Dinamarca en nombre de la Unión Europea para la creación de una comisión independiente con el objetivo de recopilar pruebas sobre las violaciones del Derecho Internacional en Afganistán.
El enviado especial de la ONU para los Derechos Humanos en este país, Richard Bennet, que tiene prohibida la entrada por “difundir propaganda” contra las autoridades, ha considerado que el establecimiento de este nuevo mecanismo “marca un hito importante en la búsqueda de la verdad, la justicia y la rendición de cuentas para el pueblo afgano”. “Esta decisión es un testimonio de valentía y perseverancia de las víctimas, supervivientes y la sociedad civil afgana, cuya incansable defensa ha hecho posible este momento”, ha aplaudido.
Información de Cactus24