LVBP: La inteligencia de Silvino Bracho, factor significativo en el título de Leones del Caracas
Ciertamente el brazo de Silvino Bracho es de durabilidad, pues en 9 ocasiones lanzó más de 1 entrada durante 30 participaciones en la lomita, pero en toda la temporada 2022/2023, nunca estuvo más allá de 2 entradas, es fue su tope alcanzado el 12 de noviembre con Águilas del Zulia en duelo ante Tigres de Aragua.
Pero, para el juego 6 de la Gran Final contra Tiburones de La Guaira, el refuerzo de los Leones del Caracas dio su mayor cantidad de innings, 3, espacio donde permitió solo 2 imparables, sin boletos y 1 abanicado; así dejó sin chance a los escualos y le dio la oportunidad a Harold Castro de hacer historia con el primer jonrón que dio el triunfo de coronación en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP):
“Un juego como este no se planea, teníamos otra proyección, hablamos ayer (domingo) para ir con el relevo, para cambiarle a ellos (Tiburones) la visión de ver al mismo lanzador en cada entrada, algo que no funcionó en las primeras 4, 5 entradas, pero pudimos mantener el juego a raya”, estimó.
Algo que permitió al cerrojo prolongar su trabajo fue la procuración de pocos envíos, eso sí resultó:
“Cuando entré solo traté de economizar envíos para no irme tan largo en cada tramo, al final tenía 29 lanzamientos con 3 innings, eso fue posible porque La Guaira se iba con los primeros pitcheos, con mi experiencia también logré que se hicieran outs solos”, explicó en declaraciones exclusivas ofrecidas a la marca Meridiano.
Para un juego como este, con una alineación como la de los escualos, experiencia, sangre fría para minimizar a hombres clave, es de suma importancia, eso Bracho lo logró dominando, por ejemplo, 2 veces a Balbino Fuenmayor (1 de ellas con ponche) y otra a Danry Vásquez, quien poco antes jonroneó para voltear la tortilla:
“Ellos son muy buenos bateadores, los respeto mucho, pero sabía que tenían ansiedad de conectarme cuadrangular, solamente apelé a mi inteligencia, tratar de no equivocarme con los pitcheos, fallé uno solo (ante Ángel Reyes), que casi da vuelacercas, soy humano y Gracias a Dios él también falló (risas).
De esta manera, Silvino Bracho la razón dio al alto mando caraquista al tomarlo como su primera escogencia en el draft de refuerzos y adiciones; en ese momento, algunos cuestionaron el movimiento, alegando que el Caracas ya tenía cerrador, Anthony Castro.
Sin embargo, este último no pudo ser de la partida desde antes de la mitad del Round Robin, instante donde el zuliano dio un paso al frente hasta ser parte de la titulación caraquista, y es probable que, sin su relevo de 3 episodios, la Gran Final hubiese requerido de un séptimo round.
Por Meridiano