Mujeres lactantes donan leche tras escasez de formulas lácteas en EEUU
Todos los días, Hillary Demmon ha estado leyendo con horror las noticias sobre la escasez de fórmula láctea para bebés en todo el país.
“Es un escenario de pesadilla en el que pensar”, dijo Demmon, quien tiene un hijo de 1 año y trabaja en la Universidad de Pittsburgh.
En la semana que terminó el 22 de mayo, casi tres cuartas partes de los productos de leche de fórmula para bebés de todo el país se agotaron en algún momento, frente al 45% de la semana anterior y el 5% del año pasado, según las cifras que Datasembly compartió con CNN.
Sabe que ahora hay mamás que deben ir de tienda en tienda en busca de alimentos para sus bebés hambrientos, y por eso Demmon decidió que no podía simplemente leer sobre el tema, sino que podía hacer algo al respecto.
“Me di cuenta de que tengo un congelador lleno de leche y todavía puedo producir más”, dijo Demmon.
Decidió comenzar a extraerse leche exclusivamente para poder donar a un banco de leche local, informó CNN.
“Pensé que esto es algo que puedo hacer tangiblemente en esta línea de tiempo de pesadilla en la que vivimos ahora para ayudar concretamente a otras familias”, dijo.
DONACIONES
Los expertos en lactancia de todo el país han oído hablar de un número cada vez mayor de madres que desean donar leche materna adicional.
Al igual que con la donación de sangre, una persona puede donar de manera segura a los bancos de leche establecidos en todo el mundo que, durante décadas, han ayudado a los bebés que de otro modo no tendrían acceso a la leche humana o tendrían un acceso limitado.
“Los bancos de leche son muy necesarios porque hay muchas fórmulas para prematuros que no están disponibles para los bebés enfermos”, dijo la Dra. Sheela Rath Geraghty, directora médica de la Clínica de Medicina de Lactancia Materna del Cincinnati Children’s. “Pedimos a todas las madres que tengan leche extra que por favor la donen a un banco de leche humana”.
Los bancos de leche han recorrido un largo camino desde que se abrió el primero en Estados Unidos a principios del siglo XX en el Boston Floating Hospital. Además de recolectar leche humana, los bancos ahora la filtran, procesan y distribuyen. Gran parte del suministro limitado se destina a bebés prematuros.
Aunque la leche humana es beneficiosa para todos los bebés, puede ser de particular ayuda para el 10 % de los bebés en EE.UU. que nacen prematuramente y son susceptibles a afecciones como la enterocolitis necrotizante, un trastorno intestinal potencialmente mortal.
La parte de selección del proceso es clave, dijo Rath Geraghty.
“Ninguna mujer debería intentar dar leche directamente al bebé de otra mujer”, dijo.
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