Pago de bono vacacional y política intervencionista del Banco Central provocó alza del precio del dólar
Si algo preocupa al venezolano actualmente es la situación económica o, para ser más específicos, el precio del dólar que durante la segunda quincena de agosto pasó, tras meses de estar estable entre los 6 y 7 bolívares, a alcanzar casi los 10 bolívares.
El episodio, según especialistas es consecuencia del pago del bono vacacional a los profesores dependientes del Ministerio del Poder Popular para la Educación y el Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria, tras una ola de protestas en el ámbito nacional, para exigir el pago completo de este beneficio en lugar del pago fraccionado en 10 partes como había ofrecido el Ejecutivo.
La economista, miembro de la firma Síntesis Financiera y creadora del Centro de Información y Análisis del Grupo Financiero Unión, Tamara Herrera, explicó en entrevista con Correo del Caroní que el alza en el mercado cambiario se debió a una muy mala combinación de circunstancias: una fuerte entrada de fondos al sistema bancario que corresponde al pago del bono vacacional de los profesores y un cambio en la política de intervención del Banco Central en el mercado de divisas.
Durante la semana de las fuertes subidas en el precio del dólar, muchos internautas responsabilizaron de la situación a las páginas de Instagram que publican diariamente el precio del paralelo, sin embargo, los propietarios de estas cuentas refutaron alegando que el valor lo establecen los mercados y que el monto presentado es el compendio de aproximaciones en el mercado internacional, afirmaciones que la especialista corroboró aseverando que el alza vertiginosa se debió a una movida “torpe” de la principal entidad bancaria nacional.
Herrera adujo que el pago del bono vacacional trajo una alta tasa de consumo, lo que se tradujo en una alta demanda de divisas por parte de los empresarios para reponer inventario.
Agregó además, que el Banco Central modificó su política de intervención con la intención de ir disminuyendo la cifra que oferta en el mercado cambiario todos los lunes. El objetivo en la modificación de esta operación era dosificar la inyección de divisas y ofertar una cantidad menor por varios días a la semana.
“Él puede haber dicho: en vez de intervenir los lunes, voy a dosificar e intervenir poco a poco a lo largo de la semana. Pero lo hizo en el peor momento posible, cuando estaba absolutamente montada una ola de demanda, en lugar de aparecerse con la cantidad de dinero promocional a esa demanda se apareció con la oferta de divisas más baja que se había presentado en dos años”, explicó la especialista.
La combinación de una demanda en el consumo y, por consiguiente, en la compra de divisas, aunada a una oferta pírrica por parte del Banco Central en el mercado cambiario fue lo que empujó el precio de la moneda estadounidense a una escalada vertiginosa, provocando fluctuaciones de casi 18% en menos de 24 horas.
“La estrategia de defensa del bolívar, desde hace año y medio, descansa en la intervención del Banco Central en el mercado cambiario y cada vez se demandan más recursos. El Banco Central requiere moderar esto porque todavía falta año y pico para el momento electoral que va a demandar más divisas para contrarrestar la fuerza del gasto público”.
Deja vú: ¿podría ser un regreso a la hiperinflación?
Especialistas económicos advierten que la aparente “recuperación económica” de Venezuela no se ha dado de forma orgánica, ya que el Banco Central retiene el cambio exprimiendo las reservas internacionales, lo que deja al país en una situación de indefensión ante cualquier emergencia.
Según estos expertos, el precio real del dólar, sin apoyos cambiarios, oscila entre los 10 y 12 bolívares. Herrera puntualizó que el dinero que se inyecta al mercado cambiario tiene origen petrolero y son divisas vendidas por Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (Pdvsa) al Banco Central, usualmente, parte de las reservas internacionales.
– ¿Esto significa que la recuperación económica es una farsa?
– Una fuerte demanda de divisas per se habla de una recuperación económica, lo que pasa es que esa semana la demanda se exacerbó por la torpeza que cometió el Banco Central y generó incertidumbre, haciendo pensar que el Banco Central no tenía cómo responder a la demanda de dólares. Esto generó pánico y se tradujo en una subida en el precio del tipo de cambio del mercado paralelo. La reanimación económica trae una reanimación en la demanda de divisas y más aún en un país tan dependiente de la importación. Es racional que el Banco Central busque disminuir la cantidad de divisas destinadas a contener el valor del dólar, pero al hacerlo de esa manera creó duda sobre la sostenibilidad, y generó una especie de deja vú de que la hiperinflación podría retornar al país.
– ¿Es sostenible la política de intervenir el mercado de divisas?
– Lo malo de este episodio es que creó duda sobre la sostenibilidad. La sostenibilidad depende del flujo de ingresos petroleros, que depende de la producción de petróleo y su capacidad de venderlo y comercializarlo en el exterior por dinero contante y sonante. Actualmente hay una porción importante de lo que exporta de manera errática Venezuela, que está representado por pago de deuda como los insumos petroleros que damos a Irán o pago de deuda china. Es importante robustecer la industria petrolera para que exista la posibilidad de recuperar producción y exportación.
– ¿A qué responde el cambio en la estrategia de inyección de divisas por parte del Banco Central?
– La inyección ocurría normalmente todos los lunes. En Síntesis Financiera estimamos que ese lunes el mercado, debido al choque que vino del pago del bono vacacional, necesitaba que el Banco Central se apareciera con 200 millones de dólares. En su lugar, ese lunes cambió su estrategia de intervención e intentó dosificar a lo largo de la semana la cantidad de divisas que inyecta al mercado, a cambio ofreció a los inversionistas un aumento en la tasa de interés para que trajeran los bolívares al Banco Central. Eso fue un cambio de estrategia que no se comunicó apropiadamente a los bancos ni al público, y se hizo en el momento más inapropiado. Cuando vas a hacer un cambio de estrategia de ese tipo, tienes que hacerla gradualmente o convocando a la banca y explicar que harás una estrategia basada en la combinación de venta de divisas y captación de bolívares con títulos de cobertura. No se hizo así.
Herrera negó la teoría de que esta alza en el precio del dólar pudiese ser una estrategia intencional del Estado para requerir de menos divisas para cancelar el pago del bono vacacional, alegando que “cuesta demasiado creer que si bien hay razones para dejar que el tipo de cambio aumente y sincerar su valor, lo que no se puede hacer es permitir que una situación de incertidumbre y pánico destroce todo el trabajo estabilizador que hiciste”, aseveró Herrera.
Fuente: Correo del Caroní