Pollo frito estilo americano kentucky
El pollo frito estilo Kentucky Fried Chicken Vamos a emular un receta de cocina muy similar a la de este establecimiento, pero hecha en casa. Sabremos los ingredientes que lleva y además, tendremos la satisfacción interior de que lo hemos hecho nosotros mismos. ¿Lo mejor de todo? Es una receta que es muy fácil de hacer. Así que todo son ventajas. Prepara este pollo frito estilo KFC y verás como tu plato triunfa entre niños y mayores.
Ingredientes
8 muslos de pollo
500ml de leche
300g de harina
1 cucharada de especias al gusto: orégano, pimentón, curry, cebolla en polvo, ajo en polvo
+1/2 cucharadita de las especias anteriores más 100g de harina
Sal y pimienta
Aceite
Preparación
Lo Primero para hacer el pollo frito estilo KFC es prepapar una tempura. Para ello, ponemos en un recipiente bastante ancho 300g de la harina y una cucharada de cada una de las especias que hayamos elegido. Añadimos también un buen pellizco de sal. Quizás te parezca que sean demasiadas especias pero, aquí está el secreto de la receta. Además, a la hora de comer, dan ese gusto que deseamos pero, no llegan a notarse tanto en boca. Añadimos también la leche, entre 350 y 400 ml. La cantidad exacta va a depender bastante de la marca de harina empleada. La idea es mezclarlo todo con una varilla y que quede una masa más bien licuada pero, con bastante cuerpo. Cuando estén todos los ingredientes bien mezclados, pasamos la varilla sobre la tempura y, si se pega a ella pero enseguida cae, está será la textura exacta que deseamos.
Ahora metemos el pollo salpimentado dentro de la tempura. Lo cubrimos bien de la misma y lo tapamos. Lo dejamos macerar mínimo una hora en el frigorífico. Si es más tiempo, mejor.
Pasado el tiempo, preparamos el rebozado exterior que llevará el pollo. En un plato ponemos los 100g de harina que teníamos reservada y le añadimos media cucharadita de las mismas especias que le habíamos puesto anteriormente a la tempura. Removemos bien todo para que se mezclen todas las especias con la harina.
Sacamos el pollo del frigorífico y, sin quitarle demasiado exceso de la masa de la tempura, lo pasamos por la harina. Que se impregne bien de ella. Después lo metemos en abundante aceite de oliva, a fuego fuerte pero, no demasiado o quedarán crudos por el centro (yo lo hago a una potencia de 7, de 9 de máximo que tiene mi vitrocerámica) y lo freimos. Estarán listos en unos 10 minutos