Sudán rompe relaciones diplomáticas con Emiratos Árabes y lo declara país «agresor»
El Gobierno de Sudán anunció este martes que rompe relaciones diplomáticas con Emiratos Árabes Unidos (EAU) y lo declaró un país «agresor», al acusarle de apoyar al grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) en la guerra en el país y de ser «cómplice de genocidio».
«A raíz de esta agresión continua, el Consejo de Seguridad y Defensa decidió declarar a Emiratos Árabes Unidos un Estado agresor y romper relaciones diplomáticas con él, así como la retirada de la embajada y del consulado general de Sudán», informó el organismo sudanés en un comunicado.
El Consejo de Seguridad y Defensa agregó que «Sudán se reserva el derecho de responder a la agresión por todos los medios para preservar la soberanía y la integridad territorial del país», de conformidad con el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, que otorga a los Estados el derecho a defenderse.
Emiratos «intensificó su apoyo y dedicó más capacidades para suministrar a la rebelión armas estratégicas avanzadas» y «continuó atacando instalaciones vitales y centros de servicios en el país», entre los que enumeró depósitos de petróleo y gas, además del aeropuerto de Port Sudán, ciudad que ha sido atacada por drones de las FAR por tercer día consecutivo, según la fuente.
Debido a estas acciones, este organismo, compuesto por los miembros del Consejo de Soberanía, su presidente, Abdelfatah al Burhan, y los ministros de Defensa, Interior, Exteriores, Justicia y de Finanzas, además del director general del Servicio de Inteligencia, decidió tomar estas medidas contra Abu Dabi
Crisis humanitaria
EAU ha negado en varias ocasiones estar involucrado en la guerra de Sudán, que ha convertido al país en escenario de una de las peores crisis humanitaria y de desplazamientos del planeta.
Esta decisión llega un día después de que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) decidiera desestimar la denuncia presentada por Sudán contra el país del golfo al no tener jurisdicción para abordarla.
Jartum presentó el 5 de marzo una denuncia contra Abu Dabi ante el Tribunal, acusando a EAU de apoyar a las FAR en una «campaña genocida» contra el pueblo masalit, un grupo étnico africano no árabe en Darfur, en el oeste de Sudán.
La CIJ no entró a evaluar el contenido del caso porque, como señaló el presidente del tribunal, Yuji Iwasawa, el cierre del caso se debe a una reserva hecha en 2005 por EAU al artículo 9 de la Convención sobre el Genocidio (1948), que ha llevado al tribunal de la ONU a no tener jurisdicción para atender la solicitud de Sudán.
Información de EFE