«Tengo una bomba», pasajero provoca aterrizaje de emergencia y es detenido
Un pasajero de Allegiant Air está siendo investigado por el FBI tras presuntamente afirmar que su portátil era una bomba. El pasajero está siendo acusado de una falsa amenaza de bomba, lo que obligó a su vuelo a realizar un aterrizaje de emergencia el domingo.
Identificado como Taj Malik Taylor, de 27 años, el sospechoso estaba sentado en la última fila a bordo del vuelo 1023 de Allegiant Air, según la declaración jurada del FBI. El avión acababa de despegar del Aeropuerto Internacional de St. Pete-Clearwater con destino al Aeropuerto Regional de Roanoke-Blacksburg cuando Taylor le dijo al pasajero que iba a su lado: «Mi portátil es una bomba».
Según la declaración jurada, los compañeros de asiento de Taylor le preguntaron qué quería decir, y en respuesta, Taylor supuestamente levantó la funda de su portátil y reiteró que era una bomba.
«El pasajero notificó inmediatamente a los auxiliares de vuelo», según un comunicado de la Oficina del Sheriff del Condado de Pinellas. «Los detectives afirman que varios otros testigos en el avión también escucharon a Taylor decir que tenía una bomba».
El avión fue desviado de regreso al Aeropuerto Internacional de St. Pete-Clearwater, donde aterrizó alrededor de las 2 p. m. «Allegiant no tolera ningún tipo de comportamiento disruptivo, por lo que se tomó la decisión de regresar al aeropuerto», declaró un portavoz de Allegiant Air a USA TODAY en un comunicado. «El avión aterrizó sin problemas y fue recibido por agentes del orden, quienes detuvieron al pasajero».
Las fuerzas del orden afirmaron haber respondido a una llamada sobre una «amenaza verbal de bomba». Los perros registraron sus pertenencias y no encontraron ninguna bomba.
Taylor declaró a las autoridades en una entrevista que recientemente había salido de un centro de salud mental y que «tomó su medicación anoche y actualmente sufría de falta de claridad mental», según la declaración jurada.
Se le acusa de una falsa amenaza de bomba, lo que puede conllevar una multa de hasta 25.000 dólares, una pena de prisión de hasta cinco años, o ambas.
El resto de los pasajeros y la tripulación desembarcaron y el vuelo se reanudó, llegando a Roanoke alrededor de las 19:57, unas cinco horas antes de lo previsto.
Información de Cactus24
