Valledupar cierra los Bolivarianos con vallenato
El telón bajó y la llama bolivariana se apagó. Valledupar despidió este martes, entre nostalgia y algarabía, los XIX Juegos Bolivarianos con un vistoso espectáculo de música, danza, tecnología, que dejó un mensaje de fraternidad y que rindió tributo a los 3.245 atletas tras competir en 46 disciplinas deportivas.
Antes de cerrar la fiesta deportiva, en la que Colombia se coronó campeón con 171 medallas de oro, sonaron los acordeones en la legendaria Plaza Alfonso López, templo del Festival Vallenato, y se dio el desfile de las once delegaciones mientras se agitaban sus banderas en un hasta pronto a Valledupar, donde según el presidente de la Organización Deportiva Bolivariana (Odebo), el colombiano Baltazar Medina, se realizaron «unos excelentes Juegos».
Aseguró, además, que la XIX edición de las justas «ha encendido la llama de la esperanza por el retorno a la normalidad de la actividad deportiva. Esa luz de la esperanza estará encendida hasta noviembre de 2015, cuando nos encontraremos nuevamente en Guayaquil, sede de los próximos Juego Bolivarianos, para volvernos a abrazar y a resaltar la importancia del deporte como el mejor medio de hermandad y de unidad entre los pueblos».
Con el fuego aún ardiendo junto al escenario, se inició el espectáculo denominado «Valledupar, leyenda viva», que tuvo en el vallenato su eje conductor para despedir por lo alto a las delegaciones que entre el 23 de junio y el 5 de julio participaron en el certamen que abrió el ciclo olímpico a París 2024.
Adiós al ritmo del acordeón
En la ceremonia de clausura, que tuvo al mapping como principal recurso para emprender el viaje por la cultura de la región y las gestas deportivas alcanzadas en escenarios que muchas veces desbordaron su capacidad por la masiva asistencia de espectadores, se apagó la llama bolivariana para darle paso a un acto de transición entre Valledupar y Guayaquil, la próxima casa de los Juegos, con la entrega de la bandera de la Odebo.
El desparpajo de Guatapí, la alegre iguana que fue la mascota de los Juegos, también fue protagonista en algunos segmentos del evento, que tuvo la interpretación de «La leyenda se hace deporte», la canción oficial de las justas.
Después del protocolo y los actos simbólicos, el show con exponentes del folclor vallenato como Ivo Díaz, Almes Granados y Wilfran Castillo avivaron el momento con los atletas, conectados con la música, que con el tema «La Invitación» y la aparición del cantante Jorge Celedón vibraron de emoción, especialmente la delegación colombiana, en su rol de anfitrión.
Los Juegos Bolivarianos fueron creados en homenaje a Simón Bolívar, por lo que llevan su nombre, e inicialmente participaron los cinco países que libertó el prócer venezolano mediante la creación de la Organización Deportiva Bolivariana (Odebo).
Bolivia, Chile, Ecuador, Panamá, Perú, Venezuela y Colombia son los siete países miembros. Y en la edición que acabó de concluir participaron también deportistas de cuatro naciones invitadas: El Salvador, Guatemala, Paraguay y República Dominicana.
EFE