Al menos 12 millones de árboles se necesitan para reforestar el Parque Henri Pittier

Deforestado. Así se percibe una parte del Parque Nacional Henri Pittier, pulmón vegetal de la región central, la cual se ha visto afectado por los incendios forestales ocurridos durante estos años.

Ante esto, el líder de la organización Sembramos Todos, Enrique García Suárez, señaló que se requieren alrededor de 12 millones de árboles para reforestar las hectáreas afectadas de este espacio natural, dado que se han perdido hasta 30 mil hectáreas de las 107 mil 800  existentes; sin contar las pérdidas ocasionadas por los incendios ocurridos en 2023, las cuales se estiman en 10 mil.

De acuerdo con Suárez, los incendios forestales no han sido espontáneos, al contrario también existen causas externas como la cacería furtiva, la castración de abejas y limpieza con fuego en los linderos del Parque Nacional Henri Pittier, originando las cenizas volantes que ocasionan irreparables daños en el ecosistema y hace que este pierda su equilibrio, reseñó El Pitazo.

Carabobo y Aragua conectados por un pulmón vegetal

Este parque se encuentra anclado en la zona norte del estado Aragua y buena parte del noreste del estado Carabobo, sin embargo, el panorama es desalentador si llega a terminar deforestado y sin vegetación en su totalidad, alertó la organización, ya que en el caso de la ciudad de Maracay se vería condenada a constantes deslaves, escasez de agua, altas temperaturas y gran cantidad de partículas de suspensión.

Otra de las consecuencias de este problema sería el aumento exponencial al cáncer y a las enfermedades respiratorias, mencionó, además de los calores insoportables, pozos secos o inviables e incendios forestales más extensos y frecuentes en las montañas. Por ello, la ciudadanía se siente inquieta por los daños ambientales y los efectos que podrían generar en la salud. “Un futuro apocalíptico perceptiblemente reversible y evitable”, sentenció.

¿Cómo prevenir los incendios?

El líder de la organización Sembramos Todos, indicó que el 90% de la responsabilidad de sofocar las llamas recae en los bomberos forestales y grupos de apoyo; sin embargo, considera que es importante que estos funcionarios cuenten con un mejor equipamiento para la extinción de incendios forestales de esta magnitud.

«Estos incendios forestales se pueden evitar», afirmó, para ello se deben realizar campañas de educación y concienciación ambiental que involucren a las comunidades, sin dejar de priorizar la exigencia a un cambio en las leyes ambientales tales como la Ley de Bosques y la Ley Penal del Ambiente, las cuales garanticen la preservación de los espacios naturales.

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