Criminales en Colombia se burlan de la policía al cometer delitos con falsas cédulas venezolanas

Desde hace algunos días viene aumentando el ruido alrededor de un inédito mundo del crimen en Santander, Colombia. Lo que parecerían ser casos aislados comienzan a conectarse a través de un elemento en concreto: la falsificación de las cédulas venezolanas.

El primer método adaptado por aquellos que utilizan la documentación impropia es el de pasar del crimen armado al ‘raponazo’. De acuerdo a lo que explicó el concejal de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, “la modalidad de delito cambió. Los delincuentes saben más de ley que nosotros. Saben que si son capturados por un tema de raponazo, como no usó arma de fuego o cortopunzante, pues no es tipificado como una pena de cárcel. Termina siendo simplemente un tema sancionatorio”.

Sin un delito que amerite para el aseguramiento intramural y sin un documento real, los delincuentes en Bucaramanga tienen otra reacción sistemática. Esta se relaciona al comportamiento que han tomado al momento de su captura, pues conscientes de la facilidad que tendrán para quedar en libertad, se ríen a carcajadas, burlándose de la Policía.

Siete personas, por lo menos, fueron reportadas recientemente por sus actitudes de escarnio frente a la autoridad que los captura.

Lo anterior ha causado indignación en los habitantes de Santander, pues se sienten desprotegidos e irrespetandos por los autores de crímenes que hoy por hoy dejan sin tranquilidad a la población.

“Esto es lo que ha indignado a comandantes, ha indignado a al ciudadano, pues nos hace sentir que el mismo ladrón se burla en la cara de todos nosotros”, siguió diciendo el concejal Beltrán, quien además aseguró que esto “solo vuelve más delicado el tema de la xenofobia”.

EL PRECIO

Otro de los detalles revelados es el precio que pueden llegar a cobrar por una cédula venezolana falsa. Los costos por cada papel pueden ascender en el rango de los 150.000 a los 200.000 pesos colombianos.

Por otro lado, las identificaciones son ofrecidas a través de grupos de Facebook, conversaciones de WhatsApp o promocionadas por medio del voz a voz. Otro tipo de documentación como pasaportes, PPT (permiso de trabajo) o licencias de conducción también son distribuidos.

Se esperan respuestas de la Fiscalía y de la Policía en el caso.

Semana/La Patilla