El brote de Marburgo en Guinea Ecuatorial acumula 12 muertos confirmados

El brote de la enfermedad del virus de Marburgo declarado a mediados de febrero en Guinea Ecuatorial registró ya 17 casos confirmados, incluyendo 12 fallecidos, informó este jueves el Ministerio de Sanidad del país.

A fecha del lunes 24 de abril, el brote acumulaba “un total de 17 casos y 12 fallecidos”, confirmó a través de la red social Twitter el Ministerio.

Por otro lado, según el último informe de las autoridades ecuatoguineanas, todos los distritos de la provincia de Kié-Ntem (noreste de la región continental del país) y algunos distritos de Wele-Nzas (sureste) alcanzaron ya los 42 días consecutivos sin nuevos casos que requieren los protocolos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para declarar el fin de una epidemia.

Sólo detectó nuevos contagios durante los últimos 21 días la provincia Litoral, en concreto el distrito de Bata, donde se encuentra la ciudad homónima y capital de la región continental, con tres casos confirmados en los pueblos de Lea y Nkombolong.

Después de que Guinea Ecuatorial declarara su brote el pasado 13 de febrero, Tanzania anunció el 21 de marzo otra epidemia de esta enfermedad, la primera en su historia, con al menos ocho casos confirmados en el noreste del país y cinco muertos, aunque de momento no se ha concretado un vínculo.

La de Marburgo es una fiebre hemorrágica viral altamente infecciosa de la misma familia que la más conocida enfermedad del virus del Ébola.

El brote más reciente de esta enfermedad se detectó en Ghana en 2022 (tres infecciones confirmadas), y antes hubo casos en Guinea-Conakri (2021), Uganda (2017, 2014, 2012 y 2007), Angola (2004-2005), República Democrática del Congo (1998 y 2000), Kenia (1990, 1987 y 1980) y Sudáfrica (1975). Es tan mortífera como la del ébola y se estima que en África ha causado la muerte de más de 3.500 personas.

Al igual que el ébola, ese virus provoca hemorragias repentinas y puede producir la muerte en pocos días, con un período de incubación de 2 a 21 días y una tasa de mortalidad de hasta el 88 %.

Los murciélagos de la fruta son los huéspedes naturales de este virus, que cuando es transmitido a los humanos puede ser contagiado mediante contacto directo con fluidos como la sangre, saliva, vómitos u orina.

La enfermedad, para la que no hay vacuna ni tratamiento específico, fue detectada en 1967 en la ciudad alemana de Marburgo -origen de su nombre- por técnicos de laboratorio que resultaron infectados cuando investigaban a monos traídos de Uganda.

EFE