Europa ha gastado 60 mil millones de euros en energía rusa en casi cuatro meses

Los países europeos han invertido desde el inicio de la guerra de Ucrania, poco más de tres meses, aproximadamente 60 mil millones de euros en carbón, petróleo y gas procedentes de Rusia, anunció hoy la plataforma de ONG ecologistas Europe Beyond Coal (Europa más allá del Carbón).

La iniciativa lanzó este miércoles un contador que muestra en tiempo real la cantidad que cada país ha gastado en combustibles fósiles rusos, así como las alternativas renovables que podrían adquirirse con estos importes.

Así, con los 60 mil millones invertidos durante los 100 días desde que comenzó la guerra, podrían haberse instalado aproximadamente 735 mil tejados solares, placas solares con la extensión de 7 mil 300 campos de fútbol, mil 900 turbinas eólicas terrestres y 300 marinas.

Además, el importe permitiría también aislar térmicamente 270 mil hogares e instalar un millón de bombas de calor, afirmó Kathrin Gutmann, directora de campaña de Europe Beyond Coal, una plataforma de varias organizaciones que abogan por la transición energética.

El contador se basa en estimaciones calculadas en base a datos de Eurostat, de sistemas rastreadores de transporte marítimo y de informaciones sobre flujos de gas de la Red Europea de Operadores de Sistemas de Transmisión de Gas (ENTSOG).

Alemania lidera las compras

En los aproximadamente 100 días transcurridos desde el inicio de la invasión de Ucrania, Rusia ha exportado a Europa según estos cálculos petróleo por valor de 32 mil 526 millones de euros, gas por valor de 25 mil 849 millones y carbón por valor de mil 588 millones.

A la cabeza del continente en importaciones se encuentra Alemania, que con base en datos de 2019 ha invertido desde finales de febrero 24 mil 116 millones de euros en combustibles fósiles rusos.

Le siguen Italia, con 14 mil 304 millones, y Países Bajos, con 13 mil 489 millones, en ambos casos en base a datos de 2021.

España, por su parte, ha gastado 5 mil 085 millones en energía rusa desde que comenzó la guerra, según estimaciones sobre datos del año pasado.

«Durante décadas, los mayores compradores europeos de combustibles fósiles rusos han elegido cerrar los ojos ante las violaciones de derechos humanos y de las leyes medioambientales e internacionales por parte del Kremlin,» declaró Kostiantyn Krynytskyi, responsable de energía de la ONG ucraniana Ecoaction.

Las consecuencias de este «error moral y estratégico» están ahora claras para todos, dictaminó Krynytskyi, que instó a detener de inmediato las «contribuciones a la maquinaria de guerra rusa».

EFE