VOA: “Bajo espiral inflacionaria y salarios pulverizados”, así pasan los días los venezolanos

Para muchos venezolanos, la situación económica es una de las mayores preocupaciones. Creen que ante la dolarización de facto de los bienes y servicios, el gobierno debería pagar las pensiones y salarios en dólares.

Hace un año, tras el último aumento del gobierno, el salario mínimo en Venezuela que reciben unos 700 mil trabajadores públicos y poco más de 4 millones 500 mil pensionados era el equivalente en bolívares a unos 30 dólares mensuales, pero actualmente son 5,38 dólares calculados a tasa oficial.

Mientras tanto, los precios siguen subiendo. La inflación de febrero alcanzó un 20,2%, y la anualizada en un 537,7%, según estimaciones del Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), un ente independiente que surgió para contribuir a la elaboración de estadísticas económicas y hacer frente a la ausencia de datos en el país.

Esto, aseguran sus miembros, “configura una situación inflacionaria donde las autoridades fiscales y monetarias lucen desbordadas y sin instrumentos para detenerla” y varios expertos advierten que el país está al borde de entrar en un nuevo proceso de hiperinflación.

Canasta básica por las nubes

En diciembre, la canasta básica alimentaria para un grupo familiar de cinco personas fue de 377 dólares, de acuerdo con estimaciones del Centro de Documentación y Análisis para los Trabajadores (CENDA). En ese entonces, el ingreso mínimo familiar de dos personas trabajando alcanzaba “para comprar la comida para dos días al mes”.

Fuera de la llamada “burbuja” que integrantes de los sectores más pudientes de Venezuela constantemente exponen en redes sociales, la situación es palpable en las calles y especialmente en los supermercados.

Los ciudadanos no dejan de expresar asombro ante el notable aumento de los precios y constantemente se desahogan cuando llegan a pagar en la caja. “¡Qué caro está todo!”, se suele escuchar.

Según PsicoData, un reciente estudio de la Escuela de Psicología de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), los problemas económicos son la principal causa de estrés para el 64,5% de la población.

El más reciente sondeo de opinión de la encuestadora Datincorp revela que el 57% de los consultados señala a la economía (inflación, bajos salarios y desempleo) como el mayor de los problemas, y que requiere solución urgente.

Salarios de “esclavitud”

José Guerra, economista y exgerente de Investigación Económica del Banco Central de Venezuela (BCV), denunció esta semana que en el país existe una “especie de esclavitud” por los bajos salarios que paga el gobierno en un contexto, en el que, paulatinamente, se han ido eliminando los subsidios a la gasolina, la electricidad y otros servicios.

Si bien Guerra aclara no ser defensor de los subsidios, insiste en que el salario “ha caído de manera dramática” y reta al gobierno a presentar cifras, pues, a su juicio, el Estado sí está en capacidad de pagar “un salario razonable de entre 100 y 150 dólares”.

El salario mínimo base en Venezuela no llega hoy a los 10 dólares mensuales al cambio.

Víctor Álvarez, economista y exministro de Industrias Básicas y Minería, sostiene que una de las fuentes para aumentar el salario mínimo de la nómina pública es la sustitución del Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF), que impone una alícuota de 3% a las operaciones comerciales o financieras que se lleven a cabo en moneda extranjera en Venezuela, por un impuesto al Débito Bancario “destinando a un fondo para pagar únicamente salario mínimo a la nómina de educación y salud”.

El gobierno insiste en atribuir la crisis que atraviesa el país a las sanciones de la comunidad internacional y exige que sean levantadas.

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