Qatar inauguró su último estadio antes del Mundial de Fútbol con un partido amistoso

La noche del viernes, 9 de septiembre, Qatar completó la baraja de recintos en los que se disputarán los partidos del Mundial de Fútbol, luego de inaugurar el último estadio que estaba en construcción, el Lusail. Se trata del último de los ocho estadios comprometidos a la FIFA y se terminó a poco más de dos meses del inicio del campeonato.

La inauguración se realizó en el marco de un partido amistoso entre los campeones de las ligas de Arabia Saudí y Egipto, Al Hilal y Zamalek, respectivamente. 

Al respecto, Hassan Al-Thawadi, secretario general del comité supremo de organización, expresó su emoción en torno al “final de un recorrido de 13 años”. 

El partido, precedido de un concierto del cantante egipcio Amr Diab, fue “el último test en la preparación de un estadio”, explicó el director general del comité de organización, Yasir Al-Jamal. Fue un ensayo general, a pequeña escala, de lo que le espera al emirato, anfitrión de la Copa del Mundo de Clubes en 2019 y 2020, y la Copa Árabe en 2021. 

Triunfo saudí

La cita, que recibió el nombre de Lusail Super Cup, se disputó con todas las entradas vendidas y se selló con un triunfo por penales del Al-Hilal, dirigido por el argentino Ramón Díaz, por 4-1, tras un empate a un gol al término de los noventa minutos. 

Los 80.000 espectadores disfrutaron de un partido con dominio del Hilal, en el estadio con mayor capacidad del que dispondrá Qatar para el campeonato del mundo, y cuya construcción costó unos 700 millones de euros.

Está previsto que entre 1 y 1,2 millones de visitantes viajen al Mundial en un país de cerca de 3 millones de habitantes (la mayoría expatriados, cuyas banderas se veían este viernes en las gradas). Más de 2,45 millones de entradas de los 3 millones disponibles a Qatar, anfitrión de la Copa del Mundo.